Entre la tierra y el aire
Tierra, tú que me muestras el olor de humedad, que te resbalas entre mis dedos y me manchas. Que me diste el regalo de una lágrima mientras intentaba quererte, mientras intentaba hacerte cerca de mí. Tras las manos va la piel y tras de ti voy guiada por tu fertilidad.
Aire, tú que me traspasas como espada de doble filo, que te escondes en mi pelo. Que me robaste el aliento mientras gritaba un quererte, llévame sin alas, sin hilos que me sujeten… hacia ti.
Aire, tú que me traspasas como espada de doble filo, que te escondes en mi pelo. Que me robaste el aliento mientras gritaba un quererte, llévame sin alas, sin hilos que me sujeten… hacia ti.